NUEVA SECCIÓN: Política para camaleones
La política, tal como se practica hoy, no se entiende con titulares ni se resuelve con indignación. Hay que escarbar debajo de los discursos, desmontar los gestos, analizar la maquinaria emocional que convierte a un líder en figura intocable y a un votante en feligrés obediente.
Esta nueva sección del canal, que estará disponible en cuanto solucione un par de desafíos técnicos, parte de una idea sencilla: el poder se construye sobre emociones manipuladas, sobre pulsiones, sobre ficciones eficaces. No hay estrategia electoral que no se apoye en una herida colectiva ni campaña que no agite algún miedo dormido. Cada promesa tiene detrás un cálculo, cada enemigo público está diseñado con bisturí.
Aquí se hablará de psicopatía, de narcisismo, de victimismo funcional, de tribalismo identitario, de ingeniería emocional y de la creciente fascinación por el autoritarismo. Todo lo que convierte la política en un teatro de estímulos controlados y respuestas previsibles.
No habrá pedagogía ni neutralidad forzada. El objetivo no es informar, sino incomodar. Hay quien necesita certezas; yo prefiero ofrecer preguntas mal planteadas y respuestas que no alivian.
Esto no va de partidos, ni de bandos. Va de estructuras psicológicas que se repiten, de mecanismos que atraviesan ideologías. Porque al final, lo que cuenta no es quién grita más fuerte, sino quién sabe mejor cómo manejar el silencio ajeno.
Bienvenidos a Política para Camaleones. Aquí no se viene a entender el sistema. Se viene a entender por qué nadie quiere cambiarlo.